Ya sea en un SPA urbano -para liberarnos del estrés tras un interminable día-, un fin de semana para renovarnos y recuperar el equilibrio, o una estancia en un Hotel SPA… estarás regalándote una cura de salud integral y de bienestar. SPA es sinónimo de relajación, renovación vital, descanso, belleza y placer. Y ahora hay ofertas y paquetes baratos en casi todos los centros.
En manos de profesionales cualificados en hidroterapia, los SPA ofrecen circuitos termales relajantes que incluyen baños de sales, de espuma, de burbujas, de agua salada, o a base de plantas medicinales; chorros y duchas de agua a presión; tratamientos de frío o calor, piscinas termales… y todo ello en el ambiente de relajación y bienestar inigualable que ofrece un SPA.
Desde la Antigüedad se utiliza el poder curativo del agua para recuperar o mantener la salud física y mental. En un SPA utilizan esa capacidad sanadora y fuente de bienestar del agua -aprovechando sus propiedades químicas, térmicas y mecánicas-, para incidir global o localmente en el organismo. Los estímulos producidos sobre nuestra piel activan la circulación de la sangre actuando así sobre el sistema nervioso.
De ahí provienen todos sus beneficios para el organismo y la mejora global de la salud. El SPA utiliza todas las ventajas del tratamiento del agua orientándola a nuestras necesidades y deseos: liberarnos del estrés o la ansiedad, aliviar la depresión, tratar los dolores musculares y articulares, mejorar problemas de la circulación o de la piel…
También son muy demandados por su alta eficacia en el campo de la belleza. Los SPA frecen una amplia gama de tratamientos estéticos faciales y corporales, como pueden ser terapias exfoliantes, mascarillas, masajes faciales, terapias envolventes de algas o lodos para adelgazar, tratamientos reafirmantes o anticelulíticos…. En la mayoría de los SPA tratan problemas de sobrepeso, manchas y arrugas.
Sin olvidar que casi todos los SPA utilizan terapias combinadas para reforzar los efectos de la hidroterapia, aprovechando las propiedades curativas y relajantes de otras terapias alternativas, sobre todo en la aplicación de masajes o para estimular la salud y el bienestar a través del olfato: Aromaterapia, Cromoterapia, Reiki, Vinoterapia, Chocolaterapia…
Y si lo deseamos, en las piscinas termales del SPA podemos nadar y de paso tonificar nuestros músculos, aprovechando la ingravidez de flotar sin esfuerzo, para sentir la paz y disfrutar de esa placentera sensación de libertad.
Hay muchísima oferta orientada a ajustarse a nuestro bolsillo, tiempo y preferencias, agrupados en distintas categorías: SPA urbano o rural, Hotel SPA, Balneario SPA…. Y ofertas especiales muy atractivas: Escapadas Románticas, especiales puentes o vacaciones, mayores de 55 años…
Ya no hay excusa para no disfrutar de las bendiciones del agua termal en un SPA…. ¿vivir o sobrevivir?