EJERCICIOS
DE ORTOGRAFÍA CON SOLUCIONES PARA EXÁMENES Y OPOSICIONES (GUARDIA
CIVIL, POLICÍA
NACIONAL,
POLICÍA LOCAL, BOMBEROS...)
PARA IMPRIMIR O REALIZAR ONLINE.
EJERCICIOS
DE ORTOGRAFÍA PARA OPOSICIONES 4
Lee
los siguientes textos, y anota todas las palabras mal escritas, ya
sea por un error de ortografía, ausencia de tilde o incorrecta
acentuación. Después comprueba en las soluciones los textos
correctamente escritos, para saber si has cometido algún error
ortográfico:
EJERCICIO
1
¿Con
que derecho encayas en mi puerto ávido de amor? Enchido de soverbia
e inmerso en un alubión de insultos, cada vez menos cabal, cavas un
hollo en mis entrañas y me impides reacionar, cada vez más bejada y
maltrecha ¡Que mal me encuentro y cuan difícil veo la liberación
de mis cadenas! No se como hacer para recuperar la dignidad perdida…
EJERCICIO
2
En
realidad, conocía ya el contenido del sobre. O, cómo descubrió mas
tarde, creia conocerlo. Quizá por eso no sintió nada especial hasta
que estrajo las copias fotográficas y las estendió sobre el diván
para mirarlas vagamente aturdida, reteniendo el haliento… En su
oficio menudeaban los hayazgos insospechados en cuadernos, muebles o
encuadernaciones de libros antigüos. Seis años restaurando obras de
arte incluian una larga experiencia en trazos y correciones
originales, retoques y repintes; incluso falsificaciones.
-
En materia sentimental, princesita – solía decir Cesar - no hay
que ofrecer nunca consejos ni solucciones… Sólo un pañuelo limpio
en el momento oportuno.
EJERCICIO
3
-
No se de que te quejas – dijo mientras le envolbían el plato en
unas páginas de revista ilustrada-. Siempre te oi decir que la gente
cómo es debido no discute nunca un precio: lo paga a tocateja o se
va con la cabeza muy alta.
-
Esa regla no es válida aqui- Cesar miraba a su alrededor con marcado
despego profesional, arrugando la nariz ante la visión plebella de
los puestos de baratijas-. No con ésta gente.
-
Aún así, podías haber tenido el detalle de regalármelo tu…
Cuando era una cria me comprabas todos los caprichos.
-
Cuando eras una cria te mimé en esceso. Además, me niego a pagar
esa bulgaridad.
EJERCICIO
4
… De
pronto, sol, te llergues,
fiél
guardián de mí fracaso,
y,
en una algarabía ardiente y loca,
ladras
a los fantásmas banos
que,
mudas sombras, me amenazan
desde
el desierto del ocaso.
Cavaré
desde la aurora.
Cuando
el ocaso este al sol,
la
frente al ocaso, aurora,
me
será su esaltación.
EJERCICIOS
DE ORTOGRAFÍA PARA OPOSICIONES 4
EJERCICIO
1: RESPUESTA CORRECTA
¿Con qué derecho encallas en
mi puerto ávido de amor? Henchido de soberbia e
inmerso en un aluvión de insultos, cada vez menos
cabal, cavas un hoyo en mis entrañas y me
impides reaccionar, cada vez más vejada y
maltrecha ¡Qué mal me encuentro y cuán difícil
veo la liberación de mis cadenas! No sé cómo hacer
para recuperar la dignidad perdida…
EJERCICIO
2: RESPUESTA CORRECTA
En
realidad, conocía ya el contenido del sobre.
O, como descubrió más tarde, creía conocerlo.
Quizá por eso no sintió nada especial hasta que extrajo las
copias fotográficas y las extendió sobre
el diván para mirarlas vagamente aturdida, reteniendo el aliento…
En su oficio menudeaban los hallazgos insospechados
en cuadernos, muebles o encuadernaciones de libros antiguos.
Seis años restaurando obras de arte incluían una
larga experiencia en trazos y correcciones originales,
retoques y repintes; incluso falsificaciones.
-
En materia sentimental, princesita –solía decir César-
no hay que ofrecer nunca consejos ni soluciones… Sólo
un pañuelo limpio en el momento oportuno.
EJERCICIO
3: RESPUESTA CORRECTA
-
No sé de qué te
quejas – dijo mientras le envolvían el
plato en unas páginas de revista ilustrada-. Siempre te oí decir
que la gente como es
debido no discute nunca un precio: lo paga a tocateja o se va con la
cabeza muy alta.
-
Esa regla no es válida aquí- César miraba
a su alrededor con marcado despego profesional, arrugando la nariz
ante la visión plebeya de
los puestos de baratijas-. No con esta gente.
-
Aun así,
podías haber tenido el detalle de regalármelo tú…
Cuando era una cría me
comprabas todos los caprichos.
-
Cuando eras una cría te
mimé en exceso.
Además, me niego a pagar esa vulgaridad.
EJERCICIO
4: RESPUESTA CORRECTA
… De
pronto, sol, te yergues,
fiel guardián
de mi fracaso,
y,
en una algarabía ardiente y loca,
ladras
a los fantasmas vanos
que,
mudas sombras, me amenazan
desde
el desierto del ocaso.
Cavaré
desde la aurora.
Cuando
el ocaso esté al sol,
la
frente al ocaso, aurora,
me
será su exaltación.