Todos son caminos que pretenden alcanzar el mismo objetivo, pero cada individuo escoge el que mejor se adapta a su manera de ser o de afrontar la vida. Por ejemplo, de los tipos de yoga, el Bhakti es el elegido por las personas más emotivas, mientras que el jnana yoga es preferido por las personalidades más intelectuales.
Todos los tipos de yoga persiguen lograr el mismo fin: la unión del ser individual con lo Supremo, llegar a ser Uno con Brahma o Dios. Al tener todos ellos la misma finalidad, lo que los diferencia a los tipos de yoga son los métodos y medios que utilizan para alcanzar su meta. Pero para alcanzar la verdadera sabiduría sería necesario aprender las lecciones de cada una de las cuatro sendas.
TIPOS DE YOGA
RAJA YOGA: Es el yoga del control, tanto físico como mental. Se aplican diversas técnicas para controlar la mente y llegar a los estados más elevados de conciencia. También llamado el “Yoga Real” se basa en los 195 Yoga-sutras (o aforismos) de Patanjali, entre los que se encuentra la explicación de LAS OCHO ETAPAS DEL RAJA YOGA, una serie de pasos para purificar cuerpo y mente, y así alcanzar la Iluminación.
Se le llama también Ashtanga yoga. Además del Raja Yoga de Patanjali (proceso puramente mental), el Raja Yoga también incluye al Kundalini Yoga. Dentro de este último sub-sendero se encontraría el Hatha Yoga, el que se suele impartir en la mayoría de los centros de yoga que conocemos.
JÑANA YOGA (GÑANA-YOGA): De todas las sendas o tipos de yoga, el Gñana yoga es el camino más directo hacia el Supremo Conocimiento. Es también el yoga más complicado, e incluye el estudio de las enseñanzas y escrituras bajo la tutela de un maestro, así como la profunda reflexión y meditación para alcanzar el Smadhi (supraconciencia). Se basa en los Upanishads (parte final de los Vedas), que constituyen la filosofía Vedanta.
Es de los tipos de yoga el que más utiliza el intelecto para superar el apego al mundo material: ¿Quién soy? ¿Qué es real y qué no lo es? ¿Cuál es el sentido de la vida? Así a través de la mente y utilizando todas las técnicas ya mencionadas, se pretende derribar la ignorancia para alcanzar directamente la unión con Dios y fundirse con lo que sí es real.
KARMA YOGA: Es el yoga de la acción. Pero se trata de una acción desinteresada y sin esperar nada a cambio: se trata de una ofrenda a la divinidad. De los cuatro tipos de yoga, éste es el elegido por las personas más extrovertidas, más dispuestas a poner su vida al servicio de los demás. El karma yogui ve a Dios en todos y cada uno de seres vivos. Su corazón se va desapegando de lo material, obteniendo así la Unión y la purificación del Ser.
Para ayudarse en ese proceso de “vida activa” y ayuda desinteresada la prójimo, los practicantes de Karma yoga suelen repetir un mantra mentalmente mientras realizan sus acciones. Cada uno de los tipos de yoga tiene varios textos clásicos asociados. La forma de proceder en la senda del Karma yoga se explica en el Bhagavad Gita, como texto más representativo.
BHAKTI YOGA: Es la senda del amor y devoción a Dios. De los tipos de yoga, el bhakti es el elegido por las personas más emocionales. Es un tipo de yoga monoteísta, de amor hacia un Dios personal. A través de cánticos (kirtan), plegarias, rituales, invocaciones, lectura o escucha de historias del Señor… se pretende alcanzar esa unión con lo divino. Dios es la reencarnación del amor, y el practicante llega a él a través de la humildad y la entrega.
