Son varias las culturas que conocen la importancia del sentido del humor y de la risa para la salud y el bienestar humano. Saben que la risa no sólo proporciona bienestar, también que es una fuente natural de prevención y cura de las enfermedades.
Hace ya unos 4000 años, el antiguo imperio chino promovía un modo de risoterapia. Tenían unos templos específicos a donde las personas acudían para reír, y así mejorar su salud física y mental. Y ahora nosotros, en esta época y cultura, estamos aprendiendo a utilizar esa energía innata y maravillosa como terapia para curar.
Pero antes de seguir hablando de la risoterapia, tenemos que maravillarnos al descubrir los enormes beneficios para la salud que tiene una risa auténtica. A ver… ¿Por qué es tan bueno reírse? Se dice que cinco minutos de risa sin pausa actúa como analgésico. También que la risa nos inmuniza contra los estados depresivos y el estrés.
Unas buenas carcajadas pueden equipararse a diez minutos de ejercicio físico. De hecho, las carcajadas prolongadas, ejercitan los músculos faciales, de los hombros, brazos, abdomen, piernas, y el diafragma. También el corazón, los pulmones y el torso. La risa y el buen humor tienen un efecto relajante, alivian la tensión muscular, regulan el pulso cardíaco y mejoran la circulación sanguínea.
La risa es un mecanismo valiosísimo para mantener y recuperar el equilibrio físico, mental y emocional. Pero no todas las risas son iguales, ni sus beneficios son los mismos. No es lo mismo una débil sonrisa que una carcajada. En este sentido, hay que distinguir entre sonrisa, risa y carcajada.
La sonrisa es un gesto que concierne principalmente a la boca y los labios. Es la puerta de la risa, pero muchas personas son incapaces de traspasar ese umbral, y emotivamente jamás alcanzan otro grado de la risa. Casi siempre surge como señal de agradecimiento, ternura, compasión… o incluso puede ser una mueca apenas provista de sentimiento.
La risa es entrega, un estallido que provoca la expulsión de aire viciado y la entrada de aire nuevo. Los ojos brillan, aumenta la circulación sanguínea de los capilares del rostro, se dilata todo el sistema vascular arterial, el diafragma se afloja tras tensarse. La risa rejuvenece, eso dicen recientes estudios. Como aseguró Lucio Malaparte tras varios estudios, “cada vez que una persona ríe de verdad, añade dos días de vida a su existencia”.
La carcajada es la reina. Es el estallido verdadero, su expresión máxima. La carcajada es la auténtica terapia que la risa aporta a nuestro bienestar. Lo malo es que muy pocas personas pueden llegar a ella o mantener su alto voltaje. Se puede decir que si no se alcanza, nos perdemos los verdaderos beneficios que la risa encierra. Es una catarsis, la persona olvida su propia identidad y la lleva a conectar con su verdadera Esencia.
Cuando alguien rie a carcajadas, se produce un milagro: Esa persona, durante unos segundos, vive realmente en el presente. En ese momento, nada del pasado, futuro, preocupación... nada, ningún pensamiento cruza por su cabeza. Es una Meditación auténtica, unos instantes en los que Somos reales y auténticos.
La risa nos ayuda a desinhibirnos, a vencer nuestros miedos. Esa desinhibición nos lleva a mostrarnos tal y como somos, a aceptarnos y a querernos. Y algo importantísimo es lo que asegura el psicólogo orensano José Elias, pionero de la risoterapia en España: “EL HUMOR PUEDE RESOLVER UN 80% DE LOS CASOS DE DEPRESIÓN Y ESTRÉS”.
Una de las ventajas de acudir a un taller de risoterapia, es la energía de grupo que se genera. Los estudios al respecto aseguran que es treinta veces más probable reír en grupo que solo. Todos hemos comprobado lo contagiosa que es la risa, y ahí radica parte de su magia.
En los talleres de risoterapia se llevan a cabo distintas técnicas que, a través del juego y el entretenimiento, nos conducen a la carcajada. En su amplio abanico de diversión, se pretende conseguir que la risa aflore de un modo natural, sano, que surja del vientre y del corazón.
El ritmo de vida actual ha conseguido que seamos incapaces de reír, algo innato y exclusivo del ser humano. Sólo las personas reímos, y a través de ella volvemos a ser niños de nuevo. ¿Sabías que los bebés ya sonríen a los pocos días de nacer? ¿Qué nos hace la vida para que olvidemos algo tan maravilloso?
Como dijo Osho: “La vida es en su totalidad una gran broma cósmica. No es algo serio, tómala seriamente y la perderás. Compréndela únicamente a través de la Risa”.
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